JUGAR ANTES DE JUZGAR

Vanessa Amo Aparicio




El proyecto ha consistido en un juego que se llevó a cabo en la Plaza de la Virgen. Constaba de 20 cartas, de tamaño folio, colocadas boca abajo en el suelo. Los transeúntes, al igual que el juego popular Memoria, tenían que encontrar la pareja de cada carta, es decir, las dos que tuviesen la misma foto. Para ello cada participante contaba con tres oportunidades, y si acertaba se le regalaba una rana saltarina de papel con el lema “sáltate tus prejuicios”.
Ambas cartas eran iguales en todo, la misma foto, con los mismos colores, etc. solo se diferenciaban en que una llevaba escrito debajo “persona con VIH” y la otra “persona sin VIH”.

Las cartas se diseñaron por ordenador, con fotos descargadas de internet y de amigos. La impresión de las mismas se realizó en papel adhesivo que posteriormente se pegaba en cartones del mismo tamaño, cortados en las instalaciones del taller de talla de la facultad.
Por último, para la realización de las ranas se usaron folios de colores.
El proyecto se presentó en la plaza usando una tela cuadrangular como soporte en el suelo, y sobre ella las cartas. De este modo el participante tenía que moverse alrededor de la tela para ir levantando las cartas que le interesaban.
Conforme la gente jugaba, mi compañera y yo íbamos barajando las cartas para que el siguiente jugador no lo tuviera tan fácil.

Me interesaba que el participante no se desviara del mensaje del proyecto, por esto escogí un juego cercano a todos y fácil de resolver. Decidí realizar este trabajo porque considero que el juego es una forma agradable y eficaz de aprender. Está demostrado que aquello que se aprende jugando, es más fácil de recordar, aspecto a tener en cuenta en el objetivo que todos trabajamos.